Son los seres mas inocentes, sensibles, tiernas y dóciles que podamos conocer, ellos muchas veces son quienes dan a conocer nuestro lado tierno y sensible, cabe recordar que a pesar de que son muy tiernos e inocentes cada uno desde que esta en el vientre de su madre va preparándose de manera diferente para cuando crezcan, porque cada mamá es de una personalidad diferente a la de las otras mamás.
Así cada bebe va adquiriendo su personalidad tal vez siendo noble u orgulloso, sensible o insensible, soñador o realista, alegre o depresivo, cariñoso o frio, preocupado o relajado, pero esto no quiere decir que su carácter sea igual que al de su mamá. Su carácter se va formando al pasar de los años en sus vivencias, en sus alegrías, en sus tristezas, en sus juegos, en sus diálogos porque ellos en cada situación sabrán tomar una actitud que al principio será dependiente pero finalmente sus actitudes serán autónomas.
Esta etapa es de suma importancia debido a que en esta edad los pequeños van adquiriendo modelos de vida y personalidad; por ello es de mucha importancia darles buena formación moral destacando los valores de cada una de las personas que lo rodean como sus palabras, sus actitudes, sus hábitos.
Con los modelos que les demos, estos serán elementos que ayuden a formar la personalidad y carácter del bebe.
También es importante el compartir de ellos con nosotros pues ellos nos hacen olvidar de nuestros problemas, sacan una sonrisa de nosotros cuando no la tenemos, sacan nuestro lado tierno y dócil; viéndolos, así tan chiquitos, tan tiernos, tan dóciles, tan indefensos, siempre buscando ser consentidos y protegidos por los mas grandes.
